Capcom tenía planeado portar Resident Evil 2 a la consola de Nintendo, la Game Boy Advance.

Prometía mucho!!

Un poco de historia…

Tras el éxito cosechado por Resident Evil, Capcom lanzó la secuela en 1998, Resident Evil 2 para Playstation. Poco después, ya estaba en desarrollo la versión de Game Boy Advance, que iba a estar dividida en dos cartuchos, uno con el contenido de Leon y otro con el de Claire. La encargada de ello era Raylight Studios, un joven estudio, que fue contratado por CAPCOM para realizar los ports de las tres primeras entregas de la saga Resident Evil en formato portátil.

El problema surgió, con la capacidad de los cartuchos. Una vez llegaron al escenario de la cancha de baloncesto, se dieron cuenta de que el proyecto iba a requerir una cantidad de memoria que la GBA no podía soportar. Tres obstáculos, se toparon:

• Las voces, ya que pretendían que estuvieran todos los diálogos del original.
• Escenas de vídeo.
• Gráficos tridimensionales.

La intención, era que fuera lo más fiel posible al título de Playstation, y eso era algo muy azaroso.

Limitaciones y problemas

• La inclusión de voces de los personajes y las escenas intermedias, junto con las escenas de vídeo, fueron descartadas por no poderse adaptar a GBA.
• Muy poca variedad de zombis: civil, policia y científico.
• Sólo se habría podido jugar el Lado A, tanto con Leon como con Claire.
• Poca variedad de armas.
• Leon tenía una forma de caminar, muy extraña.
• Los zombis tenían la piel azul y saltaban hacía atrás, al ser disparados
• Escenarios, personajes y enemigos tenían que descartarse.

Con todo ello, y viendo que Residente Evil 2 exprimía al máximo posible la consola de Nintendo, los chicos de Raylight tuvieron que desechar el proyecto.

Una pena, porque hubiera sido un referente actual en la grandísima consola de 32 bits.