Operation Pig: Review y Gameplay (Nintendo SWITCH)

Operación: Proteger al cerdo

Encarnamos al agente Wood, un más que consumado agente especial del Presidente, capaz de completar las misiones más difíciles que nos encomienden. Mientras estamos a punto de resolver una de estas tareas cotidianas recibimos la llamada urgente de nuestros superiores para presentarnos en la mismísima Casa Blanca.

Nuestra siguiente misión parece algo extraña, tenemos que proteger con nuestras mejores habilidades la importante vida de … ¿un cerdo?. Ramón, que así se llama el porcino, es un regalo muy importante. Hay que salvaguardar su vida hasta que lleguen las navidades y sus jugosas carnes lleguen a su óptimo estado de madurez. Así dicho la misión no parece gran cosa y no entendemos por qué nosotros, el mejor agente del cuerpo ha sido el designado para tan banal tarea.

El problema surge por las características traviesas del animal. Le da por viajar por diversos mundos repletos de enemigos que quieren frustrar el banquete navideño del Presidente. Por suerte contamos con el habitual doctor científico inventor de numerosos cachivaches como los tele-transportadores a donde se encuentre el cerdo en peligro.

¿Qué hacer?

Desde el Laboratorio podremos acceder a los distintos mundos

El esquivo Ramón recorrerá hasta 8 mundos, compuesto cada uno de ellos por 5 pantallas. De distinta temática y variedad de enemigos, deberemos protegerle de los ataques rivales. Los controles son los básicos de este tipo de juegos, apenas podemos movernos, saltar y disparar; suficiente para un agente de la élite como nosotros.

Este título nos ofrece dos modos de juego. Por un lado podemos centrarnos sólo en conseguir la máxima puntuación, por lo que recorreremos los mundos sin parar evitando perder nuestras vidas o que el cerdo muera. Por otro lado, está el modo 100%. Cuando completamos un mundo, podemos volver a jugar las 5 pantallas pero esta vez cumpliendo tres objetivos en cada una de ellas: No perder ninguna vida, que el cerdo sobreviva con un % de energía prefijado, o completar el nivel con X segundos sobrantes. En este modo de juego no importará el «Game Over» pues podremos volver a intentarlo las veces que queramos.

Una vez completado un mundo podemos volver a jugarlos completando 3 objetivos por nivel

El modo 100% es el recomendable, al menos al principio. Por un lado alargará la vida del juego (realmente en cumplir esos objetivos está la verdadera dificultad del juego) y por otro lado no tendremos el problema del dinero. Para poder entrar al siguiente mundo necesitamos haber recogido una cierta cantidad de dinero; éste se recoge de los enemigos que vamos derrotando. Si sólo hacemos los niveles normales de cada mundo, lo habitual será que no hayamos recogido el suficiente dinero como para abrir el siguiente. Por el contrario, si repetimos el mundo para hacerlo al 100%, tendremos dinero de sobra para ir abriendo los sucesivos mundos sin problema.

Partidas rápidas

Vigila tanto tu energía como la del amigo Ramón

Lo que más caracteriza al juego es su frenetismo, cada pantallas puede llevarnos apenas 10 o 20 segundos en completarla, pero nos llevará mucho más conseguir los 3 objetivos del mismo (en las pantallas más complicadas tendremos que centrarnos primero en un objetivo y luego en otro; intentar completar varios objetivos a la vez puede resultar en volvernos de vacío).

El marcador dispondrá de mucha información que tendremos que procesar. Nuestro protagonista cuenta con 3 vidas y una barra de energía, aunque el contacto con algunos obstáculos nos hará perder una vida completa. Nuestro cerdo Ramón, también cuenta con su propia barra de energía y no tendremos que perderla de vista. Por último, la tercera barra que tendremos que controlar es la de completitud del nivel. En la parte inferior una barra roja se irá llenando conforme vayamos eliminando a los portales donde aparecen incesantemente los enemigos. Al completarse, nos darán el nivel por completado.

Los ‘power-ups’, imprescindibles para ese nivel que se te resiste

Además del oro, los enemigos derrotados soltarán una amplia variedad de objetos que podremos recoger para ayudarnos. Nuestra pistola, de munición ilimitada, podemos cambiarla por una escopeta o láser (de mayor potencia) o metralleta (triple disparo); habrá que usar estas balas con cuidado. También podremos rellenar nuestra energía y la del cerdo, así como invulnerabilidad momentánea. Para terminar, las zapatillas harán que nos movamos más rápidos y el cubito de hielo dejará a los enemigos helados, dándonos un pequeño respiro.

Sube el volumen

Otra curiosidad del juego es que la música está a cargo de José Manuel Fernández García ‘Spidey’, muy conocido por sus artículos en libros y revistas especializadas. Ahora lo podemos descubrir en su faceta musical. Desde el menú inicial podemos ajustar los volúmenes de FX y Música a nuestro gusto. (También podremos activar la opción nostálgica de scanlines). Este título, editado por Toad in Black, cuenta también con una versión para el inminente MSXVR.