by Arnau JessEl hombre que lo cambió todo…
Jordan Mechner es recordado por todos como el autor del revolucionario juego Prince of Persia en 1989. Su primer videojuego fue Karateka en 1984. Ambos juegos fueron una evolución en la animación de los videojuegos. Por este motivo, se convirtió en un referente en el mundo del entretenimiento informático.
Que crack!
En Karateka, el juego tenía característica sorprendentes para la época, como cinemáticas inspiradas en Los Siete Samuráis y una animación rotoscópica fluidísima. A pesar de todo esto y de contar con unos gráficos increíbles, Karateka casi se queda sin editor como cuenta el cofundador de Br0derbund, Doug Carlston. Muchos consideran este juego, un antepasado de Street Fighter.
Karateka utilizó los elementos clave para el éxito masivo de Prince of Persia (PoP). La fluidez de la animación con la que se dotó al protagonista de PoP, era algo que no se había visto hasta entonces. Es necesario recordar, que de aquellas, no se utilizaba la tecnología de captura de movimientos. Ambos títulos fueron publicados por Br0derbund.
Hablando de animaciones
Cuidadín, cuidadín
Para las animaciones de PoP, Mechner se pasó días estudiando vídeos y fotografías de su hermano David corriendo y saltando. Después, replicó todas estas acciones en el juego. Con ello, consiguió dotarlas de un realismo no visto hasta la fecha.
Otras cosas.
Smoking Car Productions and Brøderbund.
Posteriormente, Jordan fundó Smoking Car Productions para desarrollar un título de culto, The Last Express. Aunque fue aclamado por la crítica, las ventas no fueron las esperadas y la compañía tuvo que cerrar.
Por último, también trabajó en algunas revisiones posteriores de POP. Quizás el más recordado sea Prince of Persia: Warrior Whitin.
Actualidad
Hoy en día, el afamado desarrollador, compagina su tiempo entre escribir guiones y diseñar videojuegos.
Muy recomendable, es su canal de Youtube en el que cuenta algunas cosas muy interesantes, sobre el desarrollo de Karateka y PoP.
Fuente: Retro Gamer y Youtube
Sin duda el Prince of Persia es un inolvidable de mi memoria.Aún recuerdo el asombro de ver con que realismo se movía el personaje,y lo mejor de todo,lo hacía en mi ordenador Amiga 500.El juego desde el inicio te embarca en una aventura y la atmósfera generada por todas aquellas trampas acechando como enormes pinchos,grandes alturas,traicioneras baldosas o cuchillas que podían hacerte picadillo,entre otras cosas, hacían del juego que sintieras la muerte de forma cercana en cualquier momento,además con la tensión que supone disponer de tiempo limitado para superar cada nivel.Como anécdota de la época podría contar que el juego lo tuve pirata y venía con la posibilidad de activar vidas infinitas y con tiempo ilimitado,por lo que mi hermano y yo decidimos que teníamos que terminar ese juego y ver su final.Así lo hicimos,creo recordar que tardamos unas siete u ocho horas en conseguirlo,en varias ocasiones nos quedamos muy atascados,mi hermano cuando se encontró frente al espejo murió más veces que todos nosotros en el Abu Simbel y conseguí descubrir como superar ese reto cuando me puse a jugar,aunque en otra ocasión me quedé atascado en una fase y mi hermano consiguió superarla,hicimos entre los dos un gran equipo.Al final lo conseguimos,y aunque éramos conscientes de que lo habíamos superado con trucos,disfrutamos de la aventura como nunca creo un juego antes había conseguido hacernos sentir,y de terminar la historia de aquel valiente que aparecía en nuestra pequeña pantalla de 14″,pero que en nuestra imaginación acabábamos de vivir en sus gráficos toda una aventura Persa.
Como siempre, gracias por contarnos tus historias vividas en la época, enriquecedoras del artículo. Comparto contigo, muchas de tus opiniones. Este juego, al menos a mí, me pillo en la transición de los 8 a los 16 bits. Recuerdo probarlo en casa de un amigo, con su 286 y monitor monocromo, y sí, literalmente, FLIPAR. Jamás había visto nada así, increíble.
Por todo ello, juego clásico y autor genial.
Namaste.